El tratamiento láser del acné con IPL, también conocido como fototerapia facial con IPL o
terapia IPL para el acné, es un procedimiento no invasivo que utiliza luz de alta intensidad para
tratar y mejorar la piel propensa al acné. Generalmente se emplea para abordar diversos
problemas cutáneos, como granos, cicatrices de acné, enrojecimiento e hiperpigmentación.
¿Cómo funciona el IPL para tratar el acné?
- Absorción de luz:
Los dispositivos IPL emiten un amplio espectro de luz que se dirige a cromóforos específicos
(moléculas que absorben color) en la piel. En el caso del acné, el objetivo principal son las
bacterias Propionibacterium acnes, responsables del desarrollo de esta condición. - Efecto fototérmico:
Cuando la luz intensa es absorbida por las bacterias, genera calor, lo que lleva a su
eliminación. Esto reduce significativamente la cantidad de bacterias presentes en la superficie
de la piel, minimizando así la aparición de granos. - Regulación de la producción de sebo:
La terapia IPL también puede ayudar a regular la producción de sebo, uno de los factores
clave en la formación del acné. Al actuar sobre las glándulas sebáceas, el IPL disminuye la
producción excesiva de sebo. - Mejora de la textura de la piel:
Además de reducir el acné activo, el IPL estimula la producción de colágeno, lo que mejora la
textura general de la piel y disminuye la aparición de cicatrices de acné e hiperpigmentación.